¿Qué posturas gustan más en la cama ?

Hoy las relaciones íntimas son más variadas y polivalentes en relaciones con las parejas. Ello indiscutiblemente es fruto del mayor consumo de contenidos eróticos por medio de Internet y sobre todo en España, si bien hay algo que prácticamente no ha cambiado: los gustos de las mujeres donde son las que más se callan en este sentido, en el momento de poner sus cuerpos para fusionarlos con los de aquellas parejas por las que tanto amor sienten a nuestra pareja.

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Hemos hablado con mujeres profesionales, donde les gustan hablar sobre este tema y del ámbito a fin de que nos revelen precisamente qué posturas son las que más les hacen gozar a todas y cada una de las chicas generalmente. Ciertas de ellas te resultarán muy familiares, mas otras seguramente te sorprendan.

El tradicional misionero
Las féminas de Barna Citas lo tienen claro: la postura que más les agrada de todas y cada una de las que son realizables en nuestros días es el misionero. Uno de los motivos clave radica en la adaptabilidad de exactamente la misma, pues presenta diferentes variaciones para amoldarse a los gustos de cada chavala.

En todo caso el procedimiento es siempre y en toda circunstancia exactamente el mismo, consistiendo en que la mujer continúa tumbada bocarriba en cama, al tiempo que el hombre es el responsable de llevar las bridas de la situación. 3 factores de esta postura son los que agradan singularmente, resumiéndose el primero en las miradas de placer que los dos comparten al disfrutar de contacto visual prácticamente en todo instante. Ello da pie a, naturalmente, besos muy profundos y sinceros mientras que la penetración prosigue su marcha.

El segundo aspecto ten relación con el trasero del hombre, una de las partes preferidas de toda mujer. Exactamente el mismo puede ser agarrado por ellas e inclusive tenuemente azotado para señalarle al varón que se quiere una mayor marcha en las embestidas, agradando la sensación por igual a los dos miembros de la pareja.

Para finalizar, las chicas que desempeñan sus tareas mediante la empresa de Burgos69 señalan que el tercer factor es uno de los más esenciales para determinar que el misionero sea su postura favorita: el hombre pasa a tener acceso, dependiendo de la variación elegida, al clítoris que puede ser estimulado conforme se genera la penetración vaginal. De esta forma es posible lograr un clímax incomparable, como aquí.

La cuchara, otra postura tradicional realmente bien valorada
Por más que a una pareja le guste hacer el amor no todos y cada uno de los días dan pie a que las posturas desmandadas puedan hacerse en cama. En verdad, probablemente a veces los dos se hallen cansados y, pese a ello, deseen sostener relaciones íntimas que sean satisfactorias para las 2 partes.

Para este género de situaciones se transforma en ideal una postura que agrada a casi todas las mujeres: la cuchara.

Realizarla es sencillísimo, bastando con que la mujer se tumbe de lado y, detrás de ella, el hombre haga precisamente lo mismo, teniendo en su pecho la espalda de la fémina a la que no va a tener contrariedades para hacerle llegar al clímax en esta postura.

Y es que uno de los brazos queda absolutamente libre para efectuar otras acciones al tiempo en que el miembro viril va haciendo de las suyas, pudiendo por poner un ejemplo alentar zonas erógenas como los pechos. Por otro lado, la penetración es profunda, si bien ello depende evidentemente de la variación por la que se opte.

Para el instante del clímax las chicas de Alicante69, las que aseveran que la cuchara está en lo más alto del ranking de posturas preferidas por las mujeres, nos explican qué movimiento acostumbran a hacer. Concretamente, apartan su espalda del pecho del hombre a fin de que el ángulo dé pie a una penetración de mayor grado de profundidad. De esta manera logran un clímax increíble en todos y cada uno de los sentidos.

Ahora son las que dominan con ‘La vaquera
A toda mujer le agrada que su hombre lleve las bridas de las relaciones íntimas en cama, mas ello puede traducirse en una monotonía con la que es muy simple terminar y siempre es lo mismo. Es suficiente con invertir los papeles, pasando a ser las féminas las que dominen a los varones estando encima y controlando en todo instante la situación.

La combinación de la vaquera es una de las que más probabilidades dan a la pareja de llegar juntos al clímax, ya que la mujer es la que toma el control y se monta al caballo, es sin duda una experiencia imborrable sin ningún género de duda.

Para lograrlo, el hombre debe acostarse bocarriba, al tiempo que esta vez es la fémina quien se sienta sobre su miembro viril y va jugando con las caderas tanto subiéndolas como bajándolas para una penetración mutuamente agradable.

Las incontables chicas a las que les chifla esta postura aseveran que es increíble la sensación de ver de qué manera tienen dominado por completo a su hombre, pudiendo acrecentar o bien reducir el ritmo de las embestidas como deseen con independencia de si se hallan de cara o bien ofreciéndole la espalda al hombre.

¿Os a gustado algunas posturas que gustan más en la cama? Comentar y os daremos más consejos y ideas para disfrutar con vuestra pareja.